
Piel Sensible
La piel sensible puede afectar a todo tipo de pieles. La piel sensible puede ser congénita, pero también puede desarrollarse a lo largo de los años debido al uso de cosméticos que no se adaptan a su tipo de piel, su estilo de vida (estrés, tabaquismo, dieta...) o influencias externas nocivas (clima, contaminación, exposición excesiva al sol...) Puede ser doloroso si sufre de piel sensible o si su piel se irrita fácilmente, por ejemplo, después del contacto con el agua o como resultado del estrés o cambios en el clima.
Existen diferentes tipos de piel sensible, las cuales reaccionan fuertemente a ciertos factores:
- Piel con intolerancias
- Piel que se enrojece fácilmente
- Piel seca o deshidratada
La piel sensible no es necesariamente sinónimo de piel alérgica. Naturlmente es una piel que reacciona fuertemente a determinadas influencias externas pero esto tiene que ver con la excitabilidad de las terminaciones nerviosas de la piel. Dependiendo del tipo de piel, la sensibilidad puede manifestarse en diferentes reacciones: escozor, tirantez, picazón, sensación de calor y / o ardor, a veces en combinación con enrojecimiento.
Las causas de estas reacciones pueden ser diferentes:
- El entorno de vida: El calor, el frío, el viento, el sol, las grandes fluctuaciones de temperatura y la contaminación del aire pueden provocar escozor, sensación de ardor y enrojecimiento.
- Por contacto: La aplicación de un producto del cual un determinado ingrediente es poco tolerado, el contacto con agua muy dura o ciertos textiles pueden provocar reacciones desagradables: picor, escozor, tirones o enrojecimiento.
- Vasos sanguíneos delicados: Si las paredes de los vasos sanguíneos son muy débiles y añadiendo la influencia de ciertos factores externos, como las fluctuaciones de temperatura, o factores internos, como la comida picante o el alcohol, puede causar sofocos, enrojecimiento y sensación de calor.
Cuidado
Con pieles sensibles, es importante utilizar productos que irriten la piel lo menos posible. Por lo tanto, use productos sin fragancias sintéticas y sin colorantes ni conservantes. Si su piel estaba acostumbrada a los productos sintéticos, usted tendrá un proceso de adaptación a una alternativa natural. La piel necesitará adaptarse y podrá parecer que los síntomas empeoran por un tiempo, pero esto es temporal y positivo en sí mismo. La piel tiene que eliminar los productos de desecho y el metabolismo tiene que reactivarse. Así que no se desanime si no ve resultados inmediatos; es parte del proceso. Permítale a su piel alrededor de 4-6 semanas para encontrar un nuevo equilibrio.
- Cuidados para una limpieza suave: Es preferible limpiar la piel sensible sin agua: la combinación de leche y tónico es muy adecuada para esto, al igual que el gel limpiador micelar. Si desea exfoliar, use el exclusivo gel exfoliante. Elimina las células muertas de la piel que se adhieren a ella, sin contener gránulos ni ingredientes irritantes.
- Suero: Suero multivitamínico o suero multiactivo.
- Crema de día: Crema de día de aceite de oliva y miel con SPF-20 o la crema facial de aguacate aloe vera 24H con una crema BB ligera (con SPF-30).
- Crema de noche: Crema facial de aguacate aloe vera 24H.
- Lavarse con sal del mar Muerto: muchas personas tienen una deficiencia de magnesio, que también afecta la piel. Al lavarse con sal del Mar Muerto, usted administra minerales de manera regular y uniforme a la piel, lo que mejora la condición de la piel y la salud en general.
Consejos generales:
- Tenga precaución con el maquillaje: el maquillaje también puede contener sustancias que irriten su piel, así que lea atentamente las etiquetas.
- Cuide su dieta: Beber suficiente agua mantiene su piel bien hidratada y ayuda a los órganos que purifican su cuerpo. Además, elija productos alimenticios saludables, cuando sea posible orgánicos, como aceites y grasas vegetales (aceite de oliva prensado en frío, aguacate y aceite de coco), proteínas (de pescado salvaje y carne orgánica, entre otros), vitaminas (especialmente vitaminas A, C y E) y minerales (especialmente hierro, zinc, calcio, fósforo y magnesio).
- Evite las condiciones climáticas extremas: la exposición a la luz solar y al calor excesivos, los vientos fuertes y las temperaturas muy frías requieren un esfuerzo adicional de la piel, lo que puede hacer que se desequilibre. Si no puede evitarlo, proporcione la protección adecuada a su piel.