Crema de día para pieles maduras
Cuando la piel se vuelve más seca y fina y tiene más arrugas, se puede hablar de una piel madura. No existe una indicación de edad fija para esto, porque la edad a la que este proceso se vuelve visible puede variar mucho de una persona a otra.
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A partir de los 25 años, la división celular de la piel comienza a disminuir y los primeros signos de envejecimiento cutáneo se hacen visibles, a menudo en forma de líneas finas alrededor de los ojos. A medida que envejecemos, la división celular se ralentiza y la piel necesita más tiempo para recuperarse. La piel también produce menos sebo y ralentiza el flujo sanguíneo y la actividad celular. Esto reduce la capacidad de la piel para retener la humedad y eliminar los productos de desecho.
Especialmente después de la menopausia, este proceso se acelera debido a la disminución de la hormona estrógeno. La cantidad de colágeno en la piel luego disminuye en un 30% durante un período de aproximadamente cinco años.
Cuando la piel se vuelve más seca y fina y tiene más arrugas, se puede hablar de una piel madura. No existe una indicación de edad fija para esto, porque la edad a la que este proceso se vuelve visible puede variar mucho de una persona a otra. La condición de la piel, el estilo de vida y el cuidado de la piel influyen en esto.